24 de agosto de 2015

Camino hacia el miedo

Desciende al terror (correcto)

El terror es un género difícil de realizar (bien). Tal vez tenga un gran punto en común con la comedia, aun en su gran contraposición. Son ambos "lugares" más incómodos, lugares en los que menos empatía puede/siente el espectador, y en los que muchas veces tenemos menos llegadas. No hay (como en el drama) constantes comunes y funcionales, seguramente para quien escribe esto le den miedo o risa distintas cosas que a mi lector. Por eso hay una búsqueda de dar siempre con lo correcto (descender) a obras, a películas que logren un propósito, que es principalmente la base del terror: "angustiar al espectador". La mayoría olvida esto con frecuencia y es algo fundamental, es sentir opresión y angustia ante lo que vemos. Seguramente no esté diciendo nada nuevo, ni haciendo un gran descubrimiento, pero en esta época "del cine" de la autoconciencia, nos toca pensar, analizar, y para llegar sano y salvo a esto, al objetivo, siempre hay que ir al origen y repasar ciertos mecanismo, ya dados por sentado.

"The exorcist" (1973)

En este camino, de encontrar lo correcto, existen por un lado una película ya bastante popular como "el exorcista" del fantástico William friedkin. Y luego también la menos vista "en la boca del miedo" de John Carpenter. Son dos grandes autores, verdaderos autores. Ambos hacen un cine totalmente personal, aun en lo "fantástico" se revelan ante ello, y ponen sus obsesiones y lo que "creen y rezan" al servicio del espectador, para que (si se quiere) en una "segunda lectura/ segunda historia" tengamos una visión totalmente acertada y una gran crítica conceptual del mundo y la cultura en la que vivimos. En estas dos obras hablamos de cómo lo externo, lo otro, nos afecta, y de que modo. Y fundamentalmente que hay ciertos caminos en los que no hay regreso, no hay vuelta. Tanto el padre Merrin, el padre Karras (el exorcista) y John Trent (en la boca del miedo) saben que esa revelación "fantástica" y maligna (que viene, siempre, desde afuera) es un viaje de ida. Y en ambos caso lo aceptan fatal y drásticamente.


"In the mouth in darkness" (1994)
                
Entonces, el trabajo del cine es muchas veces alumbrar el camino (sea cualquier genero), eso es lo grandilocuente. Ya es un signo de la modernidad, que se actualiza en este arte. Si se hace un esfuerzo estos dos ejemplos, estas dos peliculas simbolizan un momento, son una diégesis y un sentido alegórico de hoy. Es una buena forma de abordar este genero, y comenzar a ver la "otra parte".